24 de enero de 2021.
Prensa CELAM. Desde la Basílica de Nuestra Señora de Guadalupe se dio inicio este 24 de enero al camino que la Iglesia del continente transitará hacia la Asamblea Eclesial de América Latina y el Caribe que se realizará del 21 al 28 de noviembre de 2021.
El evento ha sido transmitido a través de las redes sociales del Consejo Episcopal Latinoamericano – CELAM, a fin de enlazar a todo el Pueblo de Dios, “pues cada bautizado es convocado a ser protagonista en la misión”, como señaló Mons. Miguel Cabrejos Vidarte, arzobispo de Trujillo y presidente del CELAM, durante su intervención en la Presentación de la Asamblea Eclesial, recordando que “todos somos discípulos misioneros”.
Llamado a la conversión
“Este 2021 nos unirá en un gran acontecimiento eclesial para agradecer, contemplar, profundizar y reavivar los frutos y retos que nos dejó la V Conferencia General de Aparecida”, aseguró Cabrejos, quien se refirió en varias oportunidades al Magisterio del Papa Francisco y a su permanente llamado a la conversión en Evangelii gaudium, Laudato si’, Episcopalis communio, Querida Amazonía y Fratelli tutti.
La cultura del encuentro se pondrá en acción para “desplegar una eclesiología del Pueblo de Dios” mediante un proceso participativo de escucha abierto a todos y todas. “Su llamado no es sólo a quienes ostentan cargos y responsabilidades formales en la Iglesia, a los agentes pastorales organizados, o a los especialistas en teología pastoral, sino a todo fiel cristiano”, aclaró el Presidente del CELAM, para lo cual se apelará a “la teología de la sinodalidad que va abriendo los nuevos caminos que los fieles recorren en la ruta evangelizadora y del anuncio del Reino”.
“Este proceso de escucha, en perspectiva sinodal, será la base de nuestro discernimiento y nos iluminará para orientar los pasos futuros que, como CELAM y como Iglesia en la región, debemos dar en seguimiento de Jesús encarnado”, afirmó el también Presidente de la Conferencia Episcopal Peruana.
Novedad eclesiológica
“Por ello –continuó Mons. Cabrejos–, esta inédita Asamblea Eclesial se encuentra en esta perspectiva teológica, y en esta novedad eclesiológica sinodal y en salida para América Latina y el Caribe, en profunda comunión con el Santo Padre, y como ofrenda para la Iglesia Universal”.
De este modo, al hacer la memoria agradecida de Aparecida, es claro que “este acontecimiento de la Asamblea Eclesial es un hito que pretende acompañar el profundo y urgente proceso de renovación y reestructuración del CELAM, inspirado en los cuatro sueños del Papa en Querida Amazonía”.
Al compartir los sueños social, cultural, ecológico y eclesial, la Iglesia latinoamericana y caribeña espera renovar su “identidad eclesial al servicio de la vida”.
A partir de ahora, y hasta el mes de noviembre, cuando tendrá lugar en la Ciudad de México la primera Asamblea Eclesial de América Latina y el Caribe, se espera una amplia participación de hombres, mujeres, entre laicos, consagrados, diáconos, sacerdotes, obispos y cardenales, entre otros, para examinar, en la actual crisis, “la coherencia con el Evangelio de Jesús (…) en medio de los gritos de los empobrecidos y de la hermana madre Tierra en este tiempo de pandemia”.
Así, bajo el lema: “Todos somos discípulos misioneros en salida”, la Iglesia latinoamericana y caribeña emprende un itinerario de misión y conversión permanente, profundamente sinodal.